Porque dos males ha hecho mi pueblo: me dejaron a mí, fuente de agua viva, y cavaron para sí cisternas, cisternas rotas que no retienen agua. Jer 2:13
Cuando las sequias eran muy severas, las cisternas eran un alivio a su angustia, porque retenian el agua en las estaciones de lluvia. El agua es fundamental para la vida , su provición es una bendición, y sin ella moririamos.
El Señor Jesucristo es la fuente de agua viva nos da un agua especial de la cual si bebemos no tendremos sed jamás, pero a menudo su pueblo se aleja y dejan esa fuente inagotable, para irse aun desierto, donde las sequias los abate, el mundo con sus deleites y pecados, va resquebrajando lo que era una vasija que retenia la provisión de Dios, esa agua de vida, ya no la pueden retener pues su vida se ha llenado de grietas, y poco a poco lo que habia retenido dentro de si se ha ido, dejando, una vasija vacia, agrietada, y apunto de quebrarse, eso es el trabajo que hace el enemigo de nuestras almas, recuerda que el como león rugiente busca a quien devorar, él solo ha venido para matar, robar y destruir todo lo bueno que Dios ha echo en ti, no cambies esa fuente de agua viva, por oasis engañosos en el desierto.
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